Charla sobre antisemitismo

La charla se desarrolló el 29 de Septiembre de 2006
en la Facultad de Filosofìa y Letras de la UBA

Panelistas:
José
Luís Moure : Director de la Cátedra Libre de Estudios Árabes de la UBA

Norberto Mendez : Director del CEMOI (Centro de Estudios de Medio Oriente y países Islámicos -Carrera de Ciencias Políticas de la UBA-Cs.Sociales-)

Laura Ginsberg : Integrante de A.P.E.M.I.A.

Pablo Rieznik : Prof. Titular de la UBA (Investigador del Instituto Gino Germani y dirigente del P.O)

Hussein Triki : Ex embajador de la Liga de los Estados Árabes

Intervención de Laura:
Buenas Noches, en primer lugar quiero agradecer la invitación de la vicepresidencia del Centro de Estudiantes de la Facultad de Filosofía y también a su secretaría y hacer una aclaración en el sentido de que nosotros no participamos de esta actividad como agrupación en nuestro carácter ni de conocedores ni de expertos de la complejidad y de la problemática que tiene el conflicto en Medio Oriente, no obstante lo cual hemos repudiado públicamente y hemos condenado la agresión israelí en Gaza y el Líbano; lo hemos hecho públicamente en nuestro acto del último 18 de julio.
De todas maneras, me parece que es inevitable referirnos desde nuestro lugar, desde nuestra posición, a la situación que ha desatado la invasión de Israel en Gaza y el Líbano, la que ha desatado internacionalmente y particularmente en nuestro país. Y en este sentido hay dos aspectos que nos interesa abordar: por un lado la instalación de la campaña de antisemitismo y por otro lado, cómo esta situación de guerra en Medio Oriente ha puesto otra vez en escena el tema de la masacre de la AMIA y la impunidad que hay en relación al esclarecimiento del crimen.

Voy a empezar con respecto al tema del antisemitismo, que es a lo que convoca en parte a esta charla, haciendo dos señalamientos: en primer lugar, quiero contar, para aquéllos que por ahí no están informados o enterados del tema, que, en mayo de este año, en mayo de 2006, la dirección de la DAIA junto con la embajada de Israel y con la Cancillería argentina presentó su “Informe Anual sobre antisemitismo”. Se refería a los hechos de antisemitismo ocurridos durante el año 2005. Y en ese informe la DAIA actualiza todos los actos de pintadas antisemitas, agresiones verbales discriminatorias y antisemitas, y le informa al gobierno que se han duplicado estos casos respecto del año 2004. En esa oportunidad, la presentación del informe no pasó de ser algo prácticamente desapercibido a nivel social, porque fue algo que se presentó casi en un acto oficial de gobierno y en donde se acordó, de alguna manera, poner el hombro, colaborar con el aparato del Estado y, para decirlo de una manera muy brutal, educar al aparato represivo del Estado para evitar que estos hechos aumenten en su número. Apenas dos meses y medio después, cuando se desata la invasión de Israel en Gaza y en el Líbano, tanto la DAIA como la oficina para América Latina del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, denuncian un brote antisemita en la Argentina, como producto de la situación de la guerra.
Es en este contexto en donde, obviamente, se enmarcan los hechos puntuales que ocurrieron en esta Facultad de Filosofía y Letras. Esta situación, es decir, que en apenas un lapso de dos meses y medio, de pasar de un informe que fue totalmente desapercibido, a declarar que hay un brote antisemita en la Argentina, evidentemente pone de relieve dos temas: uno de ellos (no es novedoso porque lo diga yo, ya se mencionó en esta mesa) esta denuncia de que había un brote antisemita, esta campaña furiosa de que había un brote antisemita, no hacía otra cosa que ocultar el debate de las políticas genocidas que tiene Israel en Líbano, ésto es un hecho que es innegable. La instalación del brote de antisemitismo, pone en segundo, tercer o cuarto lugar la importancia de sostener un debate abierto sobre las políticas que sostiene Israel en el Líbano. Pero lo otro que también se oculta, y que tal vez también es tan o más grave, es cómo hacer para luchar contra el antisemitismo en la Argentina. Porque, finalmente, ¿de dónde viene el antisemitismo? ¿Viene como producto de las movilizaciones populares que se hicieron para repudiar la agresión de Israel en Medio Oriente o viene de las manos de los represores del aparato del Estado, que no pueden de ninguna manera evitar ser señalados, cuando aparecen pintadas antisemitas en templos o en escuelas judías, que la propia Policía Federal tiene la responsabilidad de custodiar y proteger? Entonces ¿cuál es la primera conclusión que hay que sacar? Me parece que ejemplos de las políticas de antisemitismo que provienen del riñón del aparato del Estado, tenemos muchísimos. Vinculadas al tema de la AMIA, más: ni qué hablar de que, en más de una oportunidad, donde se profanaron tumbas en el cementerio de La Tablada se encontraron como responsables a integrantes de la maldita policía bonaerense que, casualmente, estaban (uno de ellos) vinculados al propio Telleldín, el principal imputado de la causa AMIA que el gobierno de Kirchner dejó en libertad.
De manera tal de que, como primera conclusión que tenemos que sacar es que cualquier opinión que merezca hoy un hecho antisemita, no puede ser separado ni puede ser visto por fuera de lo que significa el antisemitismo hoy que es, concretamente, un elemento de persecución que tiene el propio aparato del Estado y que lo utiliza, dependiendo de las circunstancias. Sin ir más lejos, yo estoy acá en mi condición de damnificada de familiar de una víctima del atentado a la AMIA. El atentado a la AMIA, que ha sido el peor atentado antisemita que se ha cometido en el mundo en los últimos sesenta años, es un hecho que (ni siquiera ya vamos a hablar de la Argentina) pero durante estos últimos 12 años ni el Estado de Israel lo ha reivindicado en tal escala. La Argentina, el Estado argentino, a quien nosotros señalamos como el principal responsable, no sólo del encubrimiento, sino también de la criminalidad misma de la voladura de la AMIA, el Estado mismo se reconoció, por decreto, como encubridor del atentado. El Estado de Israel, que fue cómplice de las políticas de encubrimiento del Estado argentino durante doce años, ambos dos, hace pocas semanas atrás, minimizaron, redujeron a su mínima expresión, el supuesto brote de antisemitismo que había en la Argentina porque en realidad, van por mucho más: ojalá hubiera sido lo que mencionaba recién el Profesor Méndez, que salió la DAIA -voy a hacerlo, digamos de manera resumida- como si hubiera salido la DAIA a presentar esta campaña porque hubo un grupo de intelectuales judíos que se manifestaron en contra de la agresión israelí. Ojalá hubiera sido nada más que éso! ¡Es mucho más grave que éso: el tema del antisemitismo, que han minimizado tanto los representantes del Estado argentino como los representantes del Estado de Israel hace menos de dos semanas en Nueva York, es el elemento de coacción que tienen para presionar a la comunidad judía y a la sociedad argentina toda, porque justamente es lo que van a utilizar como argumento para ir contra Irán. Y ésto es lo que se viene en pocas semanas más. La segunda conclusión entonces, que tenemos que sacar, es que al Estado de Israel, no le preocupa una situación de antisemitismo… es más, ni a la propia DAIA le preocupa, porque hace muy pocos días atrás, después de haber tenido reuniones en casa de gobierno, salió a bajar los decibeles y a decir que ésto fue, casi, casi, un especie de mal entendido. Entonces, aquí, lo grave es lo que se viene: lo que se viene y que se está preparando durante este mes de octubre es el papel que va a jugar el Estado argentino, para poner, como nosotros denunciamos el último 18 de julio, la causa AMIA, al servicio de las políticas de la guerra en Medio Oriente. El Estado argentino, después de haber mantenido reuniones en EEUU para hablar de este tema, no del antisemitismo por el cual hizo campaña durante varias semanas acá... se está preparando para hacer formalmente una acusación contra el Estado de Irán, ya no en los términos en que pensaba hacer el ex juez Galeano, en donde iba a acusar a algunos elementos radicalizados del gobierno iraní. Formalmente el Fiscal Nisman que está a cargo de este trabajo sucio, está preparando una declaración, ya tiene el guiño del gobierno argentino, para ir directamente contra Irán y poner, formalmente, al Estado argentino en el terreno de Bush y Olmert de la lucha contra el terrorismo internacional, todo ésto, usando como excusa la causa AMIA.
Lo impresionante es que Nisman, que ya fracasó hace un año atrás, cuando quiso argumentar a favor de haber encontrado al “suicida” que se inmoló en la AMIA, va usar ahora los mismos argumentos de Galeano –el juez que acaba de ser destituido, que acaba de ser procesado y que, por supuesto, todavía no está preso- porque evidentemente hay una decisión política del gobierno de Kirchner de poner a la Argentina, otra vez, en el lugar de “socia” de esta campaña de terror que están explotando el gobierno de Bush y Olmert. Lo impresionante es que, así como nosotros dijimos y cada día que pasa lo comprobamos, con mucho dolor, que la Argentina ha sido un laboratorio de preparación de estas políticas de terror en Medio Oriente con la bomba de la Embajada, con la bomba en la AMIA, lo que estamos viendo hoy, es que, como consecuencia de éso, ya no son solamente las políticas de terror que están implementando EEUU e Israel en Medio Oriente. Lo que es impresionante es que se está traduciendo en la legislación que nosotros vamos a tener vigente en poco tiempo más en nuestro país. Hoy, hace un rato, me acabo de enterar que en EEUU se sancionó la ley antiterrorista. Lo impresionante es que los argumentos de esa ley son copiados del proyecto de Lanusse, cuando era funcionario del gobierno de Kirchner en el año 2004: un borrador de proyecto de la ley antiterrorista, que allí escribe los mismos argumentos que acaban de ser aprobados por el Congreso de EEUU para aplicar una ley antiterrorista en EEUU ¿Cuál es el argumento más saliente? La ley antiterrorista de Bush, impide la difusión de los archivos en nombre de la “Seguridad Nacional”. Este es un argumento copiado, calcado del proyecto de ley antiterrorista que el gobierno de Kirchner todavía no se anima a sancionar, pero está en ese terreno, está en sintonía con lo que está ocurriendo actualmente en EEUU: es más, el pronunciamiento que Nisman va a hacer en pocas semanas más para responsabilizar a Iran de la masacre de la AMIA, va en tamdem, va asociado a esta legislación que se acaba de aprobar en el Congreso americano. De manera tal de que es imposible desprenderse de estos hechos, porque no sólo es la ley antiterrorista que se viene, se viene una modificación de la ley de inteligencia nacional. Una modificación de la ley de inteligencia nacional que también va a ser aprobada en octubre, en la “solución amistosa” que Memoria Activa tiene con el Estado argentino ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y, en esa reforma que es peor que el proyecto de Pichetto ¿qué se hace? Otra vez se refuerza el secreto de Estado, ni los jueces van a poder tener acceso a documentación secreta, a no ser que sea con autorización del Presidente de la Nación, cosa que ni siquiera la ley de Inteligencia Nacional vigente hoy dice semejante barbaridad.
A mí no se me escapa, y es algo que me ha estado dando vuelta estos días, es cómo puede ser, en este mes de octubre que se viene, con estas medidas que el gobierno de Kirchner va a adoptar, estas políticas se superpongan en tiempo y espacio con el dolor y el terror que estamos viviendo los argentinos con la reciente desaparición de Julio López, con las campañas y las amenazas permanentes que hay sobre los testigos, los organismos de derechos humanos involucrados en los juicios contra los genocidas, amenazas contra periodistas, amenazas, incluso contra los jueces del tribunal, no tengo explicación alguna, pero no puedo evitar juntar estos dos hechos, porque sin duda siguen siendo muestras de los coletazos del Terrorismo de Estado de la época de la dictadura, y el Terrorismo de Estado en la Democracia, con las bombas de la AMIA, con la bomba de la Fábrica Militar de Río Tercero, con la bomba en la Embajada, con este laboratorio de preparación que ha sido la Argentina en la última década.
Queríamos participar de este panel justamente para hacer esta advertencia, para ponerlos en conocimiento de ésto que se viene. Para nosotros es muy grave: ésta es la consagración de la impunidad en la masacre de la AMIA y es la consagración de las políticas de este gobierno en materia de derechos humanos, que ya hasta el propio Kirchner reconoce como un fracaso. Él mismo dijo, hace días atrás, que no está superado el pasado en materia de lo que ha sido la impunidad de la dictadura militar y también lo dijo para el 18 de julio. Dijo que él no es Mandrake y así como no pudo superar después de 30 años la impunidad del Terrorismo de Estado durante la dictadura, tampoco podía superar o darle un punto final con esclarecimiento, con verdad y con justicia al tema AMIA. Y, sin embargo, el mismo que dijo “yo no soy Mandrake” para el tema AMIA, va a parir un Mandrake, va a parir una acusación contra Irán, sin fundamentos. Va a sumar a la Argentina al carro de la lucha contra el Terrorismo Internacional y va a consagrar la impunidad en el tema AMIA, porque no tenemos ni presos, ni sospechados, ni condenados, y tampoco ninguna prueba convincente y contundente, después de 12 años, de que haya habido alguna participación de Irán o Siria…
Por eso, y retomando el tema de la preocupación que nos trae este tema de la legislación, volvemos sobre lo fundamental: para terminar con este ocultamiento y esta impunidad de éste, el peor crimen antisemita que ha vivido nuestro país, que ha vivido el mundo en los últimos años, no queda otro camino que exigir la apertura de los archivos secretos, los que pretenden ocultar con nueva legislación, en sintonía con la legislación de Bush y de Olmert, archivos que también están ocultos en Israel y que ha sido de público conocimiento hace un par de meses atrás…Insistimos con esta consigna: es fundamental la apertura de los archivos y su entrega a una comisión investigadora que funcione independientemente del aparato de justicia y del aparato del Estado por completo…ésta va a ser la única manera de poder, no solamente esclarecer este crimen que permanece impune, sino también aportar a quebrar esta política que está llevando este gobierno para poner a la Argentina en un contexto totalmente adverso y sí, otra vez, nuevamente, en exposición a cualquier tipo de ataque antisemita en cualquier nivel, siempre de mano de las políticas del Estado argentino.
Gracias.